Esther Manso

Esther nació en Cuba y emigró a Estados Unidos en 1962 siendo niña. Su formación artística proviene de su madre, quien trabajaba en un estudio fotográfico retocando y mejorando manualmente los negativos de fotografías para la sección "Social" del periódico.

Aunque la carrera de Esther se centró en las finanzas, siempre encontró tiempo para el arte, especialmente para pintar al óleo. En 2010, debido a una grave enfermedad, se vio obligada a jubilarse y mudarse a un pequeño pueblo de Florida. Fue allí donde Esther encontró su alma. Empezó a tomar clases en línea de acolchado, costura y cualquier actividad que la mantuviera ocupada. Primero empezó haciendo muñecas de tela y luego se pasó a la arcilla polimérica. La arcilla le permitió expresar sus emociones, y a través de estas muñecas, su alma y su cuerpo comenzaron a sanar. Hoy, su deseo es inspirar a la gente y ayudar a preservar esta hermosa forma de arte para las generaciones futuras.

Esther ha recibido numerosos premios prestigiosos, como el Premio de la Industria de la Revista Doll's y el Premio de Oro PDMAG, durante cuatro años consecutivos. También recibió el Premio IDTS al Arte Destacado. Su trabajo se ha publicado en varias revistas: Art Dolls Quarterly, International Doll Artists Magazine, Dolls Magazine, Aforartistic y Pretty Toys. Es miembro del Gremio Profesional de Fabricantes de Muñecas, del Registro Internacional de Muñecas Artísticas y del Consejo de Artistas de Muñecas Originales de América. Esther asiste a diversas exposiciones a lo largo del año. Tiene cinco hijos adultos y numerosos nietos, y actualmente vive en Florida Central con su esposo.